martes, 9 de septiembre de 2008

El comienzo

Llevaba un tiempo pensando en crearme un blog, pero por apatía y por pereza no terminaba de encontrar el momento. Últimamente le he estado dando vueltas al coco, tantas que he pensado que escribir podía llegar a ser un buen método para que la cabeza deje de girar.

No es que piense que escribir soluciona los problemas, pero es buen tratamiento ante el desorden emocional. Cualquier cosa, por absurda que sea, puedes escribirla sin miedo, y llegará a cobrar sentido, de alguna forma.

Así que aquí estoy. Hace un tiempo escribía una especie de diario, ya sabes, de esos que nunca se escriben a diario. Era una forma de encontrarse a uno mismo, de limpiar, de poner las cosas en su sitio. No obstante, en cierta forma tampoco era del todo positivo, porque cada vez que lo hacía me metía muy dentro de mi cabecita. Y llegué a pensar que me estaba encerrando en ella.

Entonces dejé de escribir, y pensé que era mejor pensar que no tenía tiempo para escribir porque tenía demasiadas cosas que hacer. Estaba demasiado atareado. La vida me requería, y yo no tenía tiempo para estar perdiéndolo absurdamente escribiendo tonterías.

Pero he crecido, y me he dado cuenta de que hay tiempo para todo. Ya no soy ese adolescente que ve la vida como una línea recta. He empezado a dar vueltas, y ahora me toca volver a escribir el "diario".

Aunque, ¿sabes una cosa? los diarios de antes podremos leerlos siempre, incluso cuando seamos tan mayores que nos hayamos olvidado de que existen. Mi explicación es sencilla, el papel perdudará en el tiempo, y estos miles de millones de blogs se perderán algún día en el ciberespacio. Como lágrimas en la lluvia. Tal vez me equivoque y TODO se pierda en el tiempo, pero internet siempre me pareció "poco tangible".

Bienvenidos, y como rutina pondré en cada post la canción del momento. Ahora mismo no paro de escuchar VetustaMorla-Copenhague:




http://es.youtube.com/watch?v=CdF3HvqY4c8

No hay comentarios: